[MÚSICA] [MÚSICA] [MÚSICA] Una de las figuras más Ãntimamente relacionadas con la historia arqueológica del valle de los reyes es sin duda alguna Howard Carter. A él debemos ese espectacular y magnÃfico descubrimiento de la tumba de Tutankámon en 1922. Y realmente es una fortuna que fuese él el elegido para realizar tal hallazgo. Gracias a su metodologÃa de trabajo y gracias a que quiso reunirse de un formidable equipo, la mayor parte de ese legado que contenÃa la tumba de Tutankámon ha llegado intacto a nuestros dÃas. Howard Carter nació en un pequeño pueblo inglés en el año 1874, procedÃa de una familia humilde, de hecho él era el menor de una familia de 11 hijos. Su padre era artista, de algún modo él heredó esa habilidad por el arte, por el dibujo y realmente esto fue le que le permitió tener ese primer contacto con Egipto en el año 1891 cuando solo contaba con 17 años de edad. De algún modo la fortuna parece que le sonrió, en su vecindario una familia aristócrata recibió la visita de Percy Newberry. En aquella época Newberry aún no era el famoso egiptólogo que se irá a formar en años posteriores, era un egiptólogo muy joven pero un egiptólogo que trabajaba para la Egypt Exploration Fund, de la cual serÃa director más adelante. Esta persona estaba trabajando en yacimientos como Beni Hassan y el Versa, y necesitaba de un dibujante, y asà fue como la futura baronesa Tyssen-Amherst le presentó o le recomendó a Howard Carter del cual, vecino suyo, conocÃa sus acuarelas y sus dibujos. Y asà fue como Howard Carter unido a Percy Newberry llegó a Egipto en ese año de 1891 cuando él tenÃa 17 años de edad. Y Newberry el joven egiptólogo alrededor de 22 años de edad. En Beni Hassan y el Versa durante esa campaña, Howard Carter realizó numerosas acuarelas, dibujos, bocetos que iba tomando de las pinturas que os grababa en las tumbas de estas dos necrópolis. Aquà teneis por ejemplo un par de ejemplos que de alguna manera ilustran cuál era el tipo de trabajo que Carter desarrollaba en aquella época. Poco tiempo después, también por mediación de esta familia aristócrata que estaba financiando las excavaciones del famoso arqueólogo y egiptólogo William Matthew Flinders Petrie en la ciudad de Amarna, la ciudad de Akhenaton, bueno pues fue contratado para realizar también trabajos de dibujo en esas excavaciones, si bien ahà solo trabajo durante una campaña. En todo caso el trabajar a las órdenes de Petrie sin duda alguna bien le sirvió para proseguir con esa formación arqueológica y egiptológica más si cabe de la mano de uno de los más grandes arqueólogos de la arqueologÃa egipcia que hemos conocido. Poco tiempo después Howard Carter se asociarÃa al equipo de Henri Naville, un egiptólogo suizo que tenia la concesión de las excavaciones del templo funerario de Hatsesup en der el Bari desde el año 1894. Aquà también Howard Carter realizó numerosos dibujos, copias de pinturas, de relieves, que aparecen en la parte posterior de este templo. Aquà por ejemplo podéis ver uno de los numerosos ejemplos que podrÃamos mostrar. Se ve en pantalla al faraón Ahkeperkara, es decir, a Tutmósis primero acompañado de su madre Seni Senet. Esta es una pintura muy bonita, muy precisa, que nos recuerda como decÃa qué tipo de trabajo realizaba en aquella época Howard Carter. Poco tiempo después, you estamos en el año 1899, Maspero que era el director del servicio de antiguedades egipcio en aquella época, era casi, era realmente una norma que los directores de servicio de antiguedades fueran franceses y Maspero que conocÃa a Carter le nombró en ese año de 1899 inspector de antigüedades del alto Egipto. Con lo cual Carter you en 1900 pasó a Luxor donde estaba la sede de ese inspectorado. A partir de este momento, Carter va a tener oportunidad de trabajar en las necrópolis de Tebas oeste y por supuesto también en el valle de los reyes. Vemos el historial de Carter en esos primeros años que siguen a 1900. En 1900 por ejemplo, trabaja en la KV 42, una tumba que descubre y que pertenece a Hatsesup Meritra. También en 1901 realiza el hallazgo de KV 44, enseguida KV 45, son dos pequeñas tumbas situadas cerca de la tumba de Hatsesup. En 1903 por ejemplo, realiza las excavaciones de la tumba de Tutmósis cuarto, en este caso you bajo la concesión de el americano Theodore Davis, del cual hablaremos posteriormente. Esta es una tumba como podéis ver en la foto que aún habiendo sido saqueada, aún conservaba una gran cantidad de materiales. En 1903 excava la KV 60 donde encuentra algunas momias, entre ellas la que en el futuro será identificada como momia de la reina Hatsesup y ese mismo año precisamente es cuando también excava la KV 20, la tumba de Hatsesup y Tutmósis primero. Una de las excavaciones que según Carter serÃan de las más arduas, complejas de toda su historia arqueológica en el valle de los reyes. Los años en los que él trabaja como inspector del alto Egipto son unos años fructÃferos, unos años donde sin duda Howard Carter siguió aprendiendo y de algún modo empezó a reconocer cuál era la importancia del valle de los reyes, pero en 1904 Carter es destinado al norte y esto de algún modo va a cambiar radicalmente el curso de su historia. Esa carrera que iba lanzada que era brillante, se va a truncar en el año 1905 cuando a causa de un incidente con unos turistas franceses, que se convierte casi en un problema diplomático entre franceses e ingleses, Howard Carter decide dimitir antes que pedir disculpas, que es lo que le solicitaba su amigo Maspero. Asà es como llegamos al año 1905 y vemos que Carter se desvincula you del servicio de antiguedades. De modo que queda en una especie de tierra de nadie en la que se va a ganar la vida vendiendo acuarelas, o sirviendo como guÃa turÃstico a los turistas que en aquella época you acudÃan al paÃs del Nilo. Esos eran sus años oscuros, sus años malos. Recordemos que desde 1902 la concesión del valle de los reyes estaba en manos del empresario abogado Theodore Davis, era un americano adinerado que sentÃa una gran atracción por Egipto y en especial por el valle de los reyes. De modo que desde 1902 hasta 1914 que tuvo la concesión del valle de los reyes, esta persona financió numerosas campañas de excavación. Se realizaron en esa época numerosos descubrimientos, al principio bajo la supervisión del servicio de antiguedades con Howard Carter, pero you posteriormente él se rodeó de arqueólogos como Vaigal, como Aiton, como Kiwell, etcétera, que trabajaron con él. Si bien lo que a él le importaba realmente como veremos eran los grandes descubrimientos y no tanto la metodologÃa arqueológica, la seriedad en el trabajo que sirviera para obtener máxima información y máximo rendimiento a sus excavaciones. Por esta época se realizan una serie de descubrimientos que sirvieron de algún modo para presentar la figura de Tutankhamon, un rey que por entonces era muy poco conocido. Tenemos cómo en el año 1905 en Karnak, el arqueólogo francés Legrain descubre la llamada Estela de la Restauración. Esta es una formidable estela elegida a principios del reinado de Tutankhamon en la que él nos habla en qué condiciones se encuentran los templos egipcios después de la época de Amarna, templos que están invadidos por yerbas, que están abandonados, y nos habla de esa restauración que Tutankhamon debe hacer para volver la situación a como lo era antes de la llamada época de Amarna. Entonces, es un monumento muy importante vinculado a Tutankhamon que, como digo, se descubre en 1905. Pero también en el Valle de los Reyes, se van a producir por estos años algunos descubrimientos que sacan a la luz una vez más el nombre de Tutankhamon. Afortunadamente en esos años no se produce el descubrimiento de la KV 62, que es la tumba del propio monarca. Tenemos, por ejemplo, el hallazgo en el año 1905, 1906 por parte de una de esas campañas de Theodore Davis, de un vaso con el nombre de Nebkheperura. Es decir, el nombre de entronización de Tutankhamon. Poco tiempo después, en la campaña de 1907, se produce el descubrimiento de la KV 54. KV 54 no es estrictamente una tumba, es más bien una fosa pero una fosa de gran interés, una fosa en la que se reunieron una enorme cantidad de materiales, más de 60 recipientes, cerámicos, una gran cantidad de telas. Todo eso lo veremos después. En 1909, se produce también el descubrimiento de KV 58. Es una pequeña tumba con un pozo y cámara lateral, pero tumba en la que también se realizan una serie de hallazgos entre los cuales aparece una vez más el nombre de Tutankhamon. Estos objetos pertenecen a KV 54. Son simples sellos, pero que tienen gran importancia. Por una parte vemos a la izquierda un sello con el nombre de entronización de Tutankhamon. En la parte central, vemos la figura de un chacal de perfil mirando hacia la izquierda con prisioneros situados en su parte inferior. Vemos tres filas con tres prisioneros cada una. Es decir, son nueve prisioneros simbolizando los enemigos tradicionales de Egipto. Pues bien, esto es el sello de los oficiales de la necrópolis. Y en la parte derecha, vemos otra fotografÃa en la que podemos comprobar cómo aún se puede leer parcialmente el nombre de Tutankhamon. Este hallazgo, por ejemplo, actualmente conservado en el Museo Metropolitano de Nueva York, también pertenece a la KV 54. Si os fijáis, es un elemento vegetal, es un collar vegetal pero de grandÃsimo interés porque su estado de conservación es perfecto. Fijaros que está formado a partir de hojas de olivo colocadas de tal manera que por un lado se crea una fila de hojas que nos muestran su parte inferior, mientras que por debajo aparece otra fila de hojas que nos muestra su parte superior. Tengamos en cuenta que son hojas de olivo, con lo cual en origen, aquà se mostraba ese contraste entre el verde de un lado de la hoja y esa parte más plateada del otro lado de la hoja, lo cual hacÃa a estas piezas muy vistosas. Pero lo destacable realmente es el increible estado de conservación de esta pieza. También en KV 54 aparecieron, bueno pues, una gran cantidad de telas. Por ejemplo, esta muestra una inscripción referida al año 6 de Nebkheperura, es decir, de Tutankhamon. También vemos telas que corresponden con grandÃsima probabilidad a vendajes para momificación como la que véis arriba a la izquierda. Los vendajes para la momificación por norma tienen alrededor de 10 centÃmetros de ancho. La longitud es variable, pero la anchura suele ser de 10 centÃmetros. También se pudieron encontrar en esta fosa, en esta tumba una serie de bolsas llenas de natrón, como la que véis abajo a la izquierda y, bueno, una gran cantidad de platos, de vasijas, elementos florales, vegetales, y incluso una pequeña máscara dorada que después se supo pertenecÃa a uno de esos dos fetos hallados en la propia tumba de Tutankhamon. Con lo cual, la KV 54 tenÃa una gran importancia puesto que en este lugar se dejaron restos del banquete funerario celebrado en honor del joven faraón y también restos de los materiales empleados para la momificación. Pero esto no se reconoció en el momento del descubrimiento. De hecho, todas estas piezas fueron regaladas en ese momento del descubrimiento en los tiempos inmediatamente posteriores por parte de Theodore Davis a Herbert Winlock, que trabajaba para el Museo Metropolitano de Nueva York, y esta es la razón por la cual todas esas piezas actualmente se encuentran en ese museo neoyorquino. Cuando en 1909 se produce el descubrimiento de la KV 58 por parte de Ernest Harold Jones, que trabajaba para Theodore Davis, se realizan una serie de hallazgos en los que aparece una vez más el nombre de Tutankhamon acompañado de su esposa Anjesenamón y por el padre divino Ay. Bueno, pues, estas piezas sirvieron para que Theodore Davis tuviera el convencimiento de que KV 58 era la tumba de Tutankhamon. De hecho, cuando él publica la tumba de Horemheb en 1912, fijaros que el tÃtulo de ese libro es Las Tumbas de Horemheb y Tutankhamon. De modo que el asunto Tutankhamon quedaba felizmente resuelto a ojos de Theodore Davis que creÃa que KV 58 era la tumba de este faraón. Evidentemente en aquella época Howard Carter you manifestó su oposición. Él no creÃa en esta hipótesis de trabajo. [AUDIO EN BLANCO]